Buenas, os dejo la segunda parte de nuestro paseo por el Jardín Botánico.
Al salir de los invernaderos y subiendo una cuestecilla nos encontramos con la zona de los bonsáis, unos miniárboles muy curiosos con troncos retorcidos con aires dramáticos.
Muchos de ellos, realmente tenían una forma sorprendente, y otros se unían en un bosquecillo. Era como ver un bosque pero desde arriba, donde podías ver donde empezaba y terminaba...
Después de andar ya bastante y de llenarnos los ojos de belleza (sin saber que lo mas bonito aun estaba por venir), nos relajamos haciendo el cabra jejeje
Como podéis imaginar los árboles estaban vestidos de muchos colores otoñales:
De repente nos encontramos con una fuente en el medios del jardín, bueno, había muchas fuentes pequeñas pero esa era la que mandaba. Al lado había unas señoras hablando en un banco, unas cuantas urracas estaban bebiendo agua de la fuente y gatos andando por ahí vigilando su territorio... todos muy majos :o)
El contraste de colores era precioso.
A partir de ahora nos adentramos en la zona de flores.
Algunas de ellas eran unas auténticas supervivientes.
Estas fotos son las mas bonitas que he hecho en mi vida jejeje.
El último tramo está dedicado a las huertas, es decir, había tomates, pepinos, pimientos, etc.
Me recordó el jardín que tenía mi abuela (no tan grande claro jeje), siempre comíamos verduras de la huerta frescas y sabrosas. Daban ganas de llenar una cestita y llevártela a casa...
Buf, cuantas fotos, tranquilos que ya no tengo mas, ya están las 50 fotos colocadas.
Espero que os hayan gustado. Si es así podéis compartir el reportaje y hacer los comentarios que queráis.
Hasta lueguiiiiii.